Por Sergio Ceyca
El Instituto Sinaloense de Cultura, a través del Museo de Arte de Mazatlán, invitan al taller Webinars. Visión y enfoque para proyectos y negocios creativos, el cual impartirá con el asesor de innovación Fernando Rubio Garcidueñas. Dicho taller se realizará de manera virtual el 21 de agosto, en el que se hablará sobre quiénes son los creativos, qué implica un negocio, y otros temas que pudieran ser de interés para la comunidad artística.
El curso será de manera gratuita, pero involucrará registrarse. Ya hubo una sesión el 7 de agosto, que giró más bien en temas de definición profesional. En La Pared Cultura nos acercamos a entrevistarlo, para darles una probada de lo que se hablará en esta nueva sesión.
Fernando Rubio Garcidueñas es diseñador industrial y tiene maestría en Innovación de Negocios por CEDIM-Monterrey. Desde 1976 ha colaborado en proyectos de diseño de imagen y productos, ha colaborado con agencias y formado equipos de investigación y desarrollo en empresas.
Actualmente desarrolla modelos de negocios junto a un equipo de alto desempeño en creación de valor en productos enfocados en ventas y es Director de Operaciones e Innovación en LaFirma-Monterrey.
La Pared Noticias: Bueno, para empezar, parece que fuera sólo a empresarios, pero también se le pudiera dar un enfoque a los mismos artistas. Vi que tú también eres fotógrafo. ¿Cómo ha sido llevar una trayectoria profesional enfocada en más de un ámbito? En este caso el diseño industrial y la fotografía.
Fernando Rubio Garcidueñas: Comienzo con la “disertación” empresario y artista. Queda claro que el empresario ofrece bienes y servicios en una dinámica de cadenas productivas. El artista hace lo mismo, sin embargo sufrimos de malentendidos, pésima educación y en general un imaginario colectivo a nivel nacional sobre todo en que artista es sinónimo de “bohemio muerto de hambre”. El artista, repito, hace lo mismo que el empresario. Produce un bien: libro, obra de teatro, canción, pintura, etc. Usa una cadena productiva y vende su obra. Si le calcula bien y se cotiza, ganará muy bien. Un artista bien administrado, con visión, ambición, calidad soberbia y sobre todo con un equipo de apoyo o al menos un mánager, es todo un empresario. Mi vida profesional la muestro comúnmente en una infografía donde dice que soy 70% consultor en innovación y desarrollo de productos y modelos de negocio, 20% fotógrafo de retrato y 10 % académico asesor de proyectos. Creo que toda mi vida tanto de estudiante como de profesional he sido un poco multitask. En preparatoria, en la Universidad La Salle de la CDMX, mi tiempo se distribuía entre las clases, entrenamientos de basquetbol y colaboración en el departamento de actividades culturales realizando carteles para promoción de eventos. En la licenciatura mi tiempo más ocupado fue ya trabajando, las clases las cubría como podía. Durante mi primer posgrado, artes visuales, que nunca termine, ya estaba a cargo de una oficina de consultoría e impartía clases. Tenía al dibujo como expresión y lo sustituyó la fotografía mientras seguía atendiendo clientes de consultoría. Se intentó meter la música pero ya eran muchas cosas, o más bien, era imposible darle atención. Al mudarme a la ciudad de Monterrey escalé la fotografía a nivel profesional y la llevé junto a mi trabajo de abrir una carrera de diseño industrial en una universidad privada. A la fecha he podido equilibrar mis intereses, tiempo y valor de las tres actividades que me definen. De alguna forma siempre he sido algo diversificado. Las cosas que hago tienen sus intereses y actividades en común. En la academia atiendo proyectos de productos nuevos, en la consultoría desarrollo productos nuevos y en ese proceso siempre he usado la fotografía como herramienta. En mis presentaciones el 90% de las imágenes que uso, son mías. Tengo mi propio banco de imágenes. Mis herramientas son lo mismo para todo: celular, lap top, suit Adobe, Canon 5D y una lista de accesorios. Así que mis inversiones en equipos y software las comparto en mis tres actividades.
LPN: A veces la gente se concentra mucho en el arranque de los negocios pero, también, veo que es muy difícil el continuar andando. Parecería la segunda ley de la termodinámica en acción. ¿Cómo crees que es el trabajo que deban realizar los profesionistas para continuar reinventándose?
FRG: La evolución de un negocio exitoso pasa por un largo camino que más del 90% muere en el camino sobre todo en el primer año de vida. El inicio, el KickOff del negocio, es el punto de partida y lo leo así como lo estoy escribiendo, un KickOff, como en el futbol americano. Abres el partido buscando la mejor posición de tu equipo en el campo, acorralar al competidor, reducirlo, minimizarlo y que te deje la mejor posición para anotar. Eso es tener Visión de lo que deseas en el futuro de tu empresa y tener un claro Enfoque de funcionalidad para tus usuarios, la atracción para tus consumidores y la diferencia con tus competidores. Visión y enfoque es el primer paso. Muy pocos modelos que observas son originales. O son copias, o son inspiraciones, a veces no tienen pies ni cabeza, son deseos sin mucho análisis. Inmediatamente el proyecto se lleva a un plan que no siempre es estratégico ni por los participantes ni por las acciones y finalmente se implementa, no siempre inteligentemente. Hay prisa por cobrar y ganar dinero. No hay mucho orden, organización ni administración, ya no se diga de disciplina y salud financiera. Por todo lo anterior pocos negocios llegan a la monetización sostenida que en la evolución de su organización, sus mercados y sus ofertas lleguen a posicionarse de forma que la demanda de sus consumidores los lleven a una posición de riqueza. El camino es largo. El camino es la vida de los fundadores. Ahí a veces está el problema de muchos emprendedores. Parece que lanzan una idea sin tomársela como una apuesta de vida, sin tener la percepción que ellos son el principal activo de la empresa y así como cambian las economías, las situaciones, los ambientes, los mercados y los consumidores, el emprendedor debe ser flexible y ágil en los cambios de timón que se requiera comenzando por su vida propia. El estado de confort personal es muy tentador y se contrapone a la naturaleza de las transacciones que cambian constantemente a velocidades incrementales influenciadas por las tecnologías predominantes. Reinventarse es la búsqueda continua de ser mejor persona y hacer lo mejor para uno en nuestra vida personal, en nuestros trabajos y nuestras comunidades. Tengamos la voluntad sumada a la actitud, busquemos nuestras fortalezas, observemos nuestro entorno y encontraremos las oportunidades, hay muchas pero sólo algunas son nuestras. A veces sólo hay una. Nunca se sabe hasta que la tienes enfrente pero si no tienes esa visión y estas claramente enfocado, nunca te darás cuenta cuando esa oportunidad se para ante ti.
LPN: En este caso, en el marco de tus conferencias también se ha hablado del proyecto de ciudades creativas de la UNESCO. Es un proyecto interesante porque apuesta por volver a los artistas una fuerza económica, ¿en qué ciudades o qué casos de éxito ha habido y cómo ha sido este?
FRG: La UNESCO no invita a una ciudad que no tenga en forma clara y demostrada, por muchos años, el valor del tema en el cuál les puso atención. No es un “toque mágico” que ve “posibilidades” y al hacer la convocatoria los valores “emergen” como nunca antes se había visto. Desde 2004 se creó la iniciativa que promueve la cooperación hacia y entre las ciudades que identifiquen la creatividad como factor estratégico de desarrollo urbano sostenible. Es una Red de 180 ciudades que cubre siete ámbitos creativos: artesanía y artes populares, artes digitales, cine, diseño, gastronomía, literatura y música. Más que describirte casos de éxito te describo el perfil del éxito. No es un tema de darle trabajo o sumarle ingresos a un grupo específico o a un ecosistema creativo. El esfuerzo promueve que en una ciudad se sumen en forma coordinada, enfocada y alineados al tema en cuestión, esfuerzos en mejoras de economías creativas, sustentabilidad, mejoras urbanas y bienestar con visión de largo plazo para todos los ecosistemas involucrados. No hay una metodología, cada ciudad debe tener su propia visión, estructurar su estrategia y tener claro un programa de implementación. Todo esto en colaboración e intercambio de experiencias con las demás ciudades hermanas. Todo esto quiere decir que el principal reto es la coordinación, el trabajo en equipo en forma creativa y ambiciosa con claro beneficio comunitario que a la vez permita que cada participante pueda tener oportunidades que lo beneficien en su quehacer autoral, y productivo. No es fácil llevar a un gran equipo de mentes brillantes hacia un sólo fin que se vea reflejado en una ciudad. Ahí está el principal reto.
LPN: En la cultura mexicana no se les enseña a los artistas a proyectarse profesionalmente (por no decir que no se le enseña a nadie). Con anterioridad, este era trabajo de los publicistas, más ahora con las redes sociales el juego cambia. ¿Les recomendarías a los artistas tomar las riendas de su publicidad?
FRG: No sé si llamarle a la acción publicidad. Hoy la dinámica, sobre todo en el ámbito creativo y artístico es de una altísima presencia en medios literalmente manejados por uno mismo. El medio digital en su constante y diaria evolución y diversificación pide una atención diaria de ser posible. A más famosa y vigente es la persona mayor es la demanda de estar presente en los distintos medios que le corresponda según su giro y el momento tecnológico. Todo profesional requiere crear y comunicar su identidad digital, desde usar una comunicación básica (Email, Whatsapp) hasta toda una red que le ayude a un objetivo deseado: posicionamiento, creación de comunidades, ventas.
LPN: En el temario de la conferencia tienes un punto que llama la atención. El de ‘¿proyecto o negocio?, ¿Cuál sería la diferencia?
FRG: Todo negocio es consecuencia de un proyecto. Los creativos están entrenados para hacer proyectos no para hacer ventas. En parte porque no es parte fundamental de su educación y en parte porque es un tema que no se le pone especial atención, es más una consecuencia que un deseo. Tarde o temprano o el creativo entiende y aprende o necesita apoyo de alguien que complemente los aspectos de venta, administrativos y financieros.
LPN: Finalmente, más allá de lo preguntado, ¿habría algo más que desearías añadir? ¿Algo que quisieras señalar en especifico para los que pudieran interesarse en la conferencia?
FRG: No es grave que haya creativos desentendidos de temas empresariales si definitivamente no es lo suyo. Grave es que existan pocos interesados en crear organizaciones de alto valor colaborando con personas creativas sumando ambas visiones y esfuerzos. Los Beatles no hubieran existido de no se por su mánager. Por el auténtico quinto Beatle, Brian Epstein.
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