¿Cómo se mide la eficiencia de los asesores de los diputados? ¿Sirven realmente los millones que se gastan para que los ciudadanos tengan un mejor Poder Legislativo? ¿O de plano se trata de dar trabajo solo a los allegados e incondicionales que no fortalecen a la institución?
Por Martín Durán
Culiacán, Sin.-A pesar de las pifias, desde la llamada “ley mordaza” hasta el reciente revés de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que corrigió la plana a la Ley de Instituciones y Procedimientos Electorales recientemente aprobada, el Congreso del Estado no tiene ningún reparo en erogar cantidades millonarias cada año en pago de asesores que, en muchas ocasiones, se trata de dar trabajo a colaboradores, asistentes amigos e incluso a familiares desperdigados que poco ayudan en la labor legislativa.
Como cada diputado, por ley, tiene derecho a determinados montos para dar de alta en la nómina a cierto número de personas, no es posible saber si estos ejercicios fiscales determinan el destino de la Cámara, o si el dinero que se gasta en realidad tiene como finalidad un mejor Congreso. Es decir, cada quien lo ejerce como mejor le convenga.
En total, en un año y ocho meses de la actual 61 Legislatura se han erogado 58 millones 177 mil 564 pesos, eso hasta agosto pasado.
Y es que según las reglas administrativas del Poder Legislativo, cada diputado tiene derecho a 60 mil pesos para pagar el número de asesores o asistentes que deseen, aunque las recomendaciones de la administración siempre van en el sentido que no sobrepasen las cuatro personas.
Además, por cada diputado a cada fracción se le dan 12 mil pesos extras para usarse tentativamente en pagar asesorías, y cada coordinador parlamentario tiene acceso a otros 30 mil pesos libres.
Por ejemplo, el Partido de la Revolución Democrática que contaba antes de su disolución con dos diputados, obtenía mensualmente 24 mil y su coordinadora Imelda Castro Castro tenía un extra de 30 mil pesos, solo por ser integrante de la Junta de Coordinación Política encabezada por el priista Jesús Enrique Hernández Chávez.
En el caso del PRI, cuya fracción cuenta con el mayor número de diputados, un total de 22, se le dan 264 mil pesos, más los 30 mil para Hernández Chávez en su carácter de coordinador, lo que suma mensualmente 294 mil pesos.
Dependiendo de los acuerdos al interior del grupo parlamentario, estos dineros se usan.
¿Un gasto justificado de la Cámara?
De acuerdo con una solicitud de acceso entregada a este diario digital, durante 2014 el Congreso erogó 36 millones 14 mil 680 pesos para pago de asesores, y de enero a agosto de 2015 fue la cantidad de 22 millones 162 mil 880 pesos.
Desde luego, por su número de legisladores, el PRI fue el partido que más ingresos obtuvo en este rubro: 31 millones 997 mil en este periodo.
El Partido Acción Nacional obtuvo un total de 14 millones 544 mil 390 pesos.
El Partido Sinaloense se fue con 4 millones 363 mil 317 pesos.
El Partido de la Revolución Democrática un total de 2 millones 908 mil 878 pesos.
Aunque Movimiento Ciudadano, Nueva Alianza y el Partido del Trabajo no cuentan con grupo parlamentario, el Congreso informó que se pagó en asesores, cada uno, un total de un millón 454 mil 439 pesos.
Ahora que el PRD disolvió su fracción, la diputada Imelda Castro perdió los 30 mil pesos que obtenía por ser coordinadora, así como los 12 mil pesos de ella y de Ramón Lucas Lizárraga.